Las Rumbas en Nuévalos

¡La comida en el restaurante - simplemente espectacular! Se merece alguna que otra Estrell Michelin.

Un Hotel que vale 👍 la pena ir . Buen servicio. Buena comida. Y la atención del personal excepcional. Para mí de 10 .

Pasamos una noche y bastante bien en general Desde la habitación unas vistas fantásticas al embalse de la tranquera.

Quedamos muy sorprendidos cuando al llegar nos atendieron tan bien tanto así que hasta nos dieron un mapa hay una explicación rápida de las mejores zonas que podíamos visitar cerca de la estancia, su cercanía con el monasterio de piedra es un punto muy a su favor, las habitaciones y baños son amplias y generalmente por lo que pudimos ver bastante decentes relación calidad-precio y una higiene también buena, para mí sin duda lo mejor fue los servicios de comida y cena donde fuimos atendidos asombrosamente rápido, todo llegaba cuando tenía que llegar sin esperas y además estaba todo bastante bueno, la atención del personal de allí fue exquisita puntualizando en la atención que nos brindó en el servicio de cena y comida mikaela, que fue de 10! Tiene unas bonitas vistas del lago que le queda por detrás y también cuenta con una especie de parking propio que en el caso de estar lleno hay una especie de explanada en el lateral del hostal donde gran parte de los coches que se hospedaban también aparcaban ahí, tardábamos de 6 a 8 minutos en coche hasta el monasterio de piedra y cuenta con una gasolinera justo al lado. Si tengo que ponerle una pega pondría la que se suele poner en la mayoría de los hostales y es el ruido y el respeto al silencio que al final no es todo culpa lógicamente del hostal ya que es cosa de la gente pero no está nada insonorizado y las puertas de la habitación son como las puertas el interior de una vivienda no frena ni ruidos ni portazos de la gente y si quieres descansar es posible que la gente no te lo permita pasadas ciertas horas de la mañana. El buffet libre de desayuno también fue un acierto ya que nos pareció bastante variado y te preguntan la hora a la que más o menos deseas bajar al buffet ya que va por tramos y cuando bajas encuentras tu número de habitación en la mesa que es la que te han designado. Sin duda para nosotros fue un verdadero acierto

Habitaciones cómodas y limpias. Portarrollos papel higiénico oxidado, agua caliente tarda en llegar, muy buenas vistas y tranquilo. Atención amable, comida muy buena y las hamburguesas caseras, chuletas deliciosas. Desayuno bueno, cereales, bollería y pan para tostar, zumos... no se intolerancias

Hemos estado 3 noches, matrimonio con una niña. Y todo correcto, muy cerca del monasterio de piedra, comida bien y han tenido detalles con nuestra hija. Las habitaciones limpias y estilo sencillo pero funcional. El colchón sí que habría de mejorarse. En general muy recomendable relación calidad-precio.

He estado desayunando y comiendo, bien de comida y buen servicio. La tostá de jamon con tomate, para mi gusto le falta aceite y sal y el jamón no es bueno, no la recomiendo viendo las otras tostás. Las migas si estas acostumbrado a las manchegas o extremeñas tampoco las pidas, están pasables, la uva muy rica, la longaniza ni fu ni fa. Pollo a la brasa estupendo y muy bien hecho. Conejo en escabeche una maravilla nunca lo había probado y me ha encantado. Aunque haya cosas que no me han gustado, creo que es un sitio para ir, por eso le doy sus 5 estrellas.

Se come muy bien. Acogedor. Comida bien,

Fin de semana espectacular , un pueblo con mucho encanto y un trato inmejorable nuestro alojamiento , comida casera , volveremos sin duda c Gracias Hortensia

Estuvimos el fin de semana del 17 de noviembre. En el almuerzo pedí albóndigas y estaban frías, pero no poco calientes, sino ¡¡¡recién sacadas de la nevera!!! Para la cena pedí una hamburguesa y la sirvieron casi cruda y el pan...¡¡¡también recien sacado de la nevera!!! El personal, sin ser groseros, siempre serios, como molestos o enojados, sin la más mínima empata. La habitación muy buena vista y limpia. Roberto Sáenz