La Gatera Gastro-Bar en Breña Alta

Lugar de visita obligatoria si vas a La Palma. Comida muy exquisita con una carta que van cambiando ofreciéndote una variedad de platos caseros. Lo único negativo es que si te gusta comer bastante te quedarás con hambre, pero habrás degustado calidad.

Fuimos a cenar la noche de San Valentín. Habíamos ido varias veces y casi siempre habíamos salido satisfechos por la calidad de la comida y del servicio. Esta última vez no hemos cenado a gusto, sobre todo por la larga espera entre plato y plato ( de media más de 30 minutos) y además, la poca atención del servicio ( en ocasiones anteriores explicaban la composición de cada plato). El restaurante estaba lleno y solo había una persona en la cocina y una camarera. Observamos que servían antes a clientes que habían llegado después de nosotros y con platos mucho más elaborados que los nuestros. También nos llamó la atención que nos sirvieron dos cañas a mitad de las copas. Nos hemos ido con pocas ganas de volver.

La comida deliciosa pero tardaron muchísimo en servirnos, esperamos muchísimos entre plato y plato.

Íbamos con altas expectativas dados los comentarios y recomendaciones. Hemos pedido tres platos, los tacos de pulpo, las zamburiñas y el steak tartar y excepto las zamburiñas el resto son platos que no tienen nada de especial desde mi punto de vista Quizás hemos elegido mal pero no nos ha sorprendido y el precio es a mi parecer excesivo para lo que ofrece. Servicio correcto pero creo que le falta profesionalidad y cercanía con los comensales a la hora de recomendar, tampoco en los vinos hay conocimiento de la carta que tiene algunos buenos vinos Palmeros pero que hay que explicarlos. Lo mejor para nosotros el postre torrijas con helado muy bien conseguido. Además nos pasó que pedimos finalmente dos croquetas pues era poco las raciones y en la cocina pusieron malas caras y respiramos mal ambiente. No creo que repitamos es una pena pero deberían mejorar bastantes cosas.

Lo mejor las vieiras!!! Una salsita estupenda. Todo top 100% recomendable

Fuimos a cenar mi pareja y yo y sin dudarlo coincidimos en que es uno de los mejores sitios donde hemos estado. Las croquetas, todas las que tienen, están increíbles y tienen un sabor muy potente, son jugosas y están muy buenas, además nos resultó muy original la idea de servir dentro de una matriosca rusa las croquetas de ensaladilla rusa ahumadas. Después seguimos con el tartar de atún, la ensaladilla de peto y los tacos de pulpo, simplemente WOW con todo. De postre nos decantamos por la torrija, ¡no hemos probado otra mejor! Además, hay que destacar y poner mucho en valor el servicio rápido y atento, la camarera es un solete y en cuanto a la cocina, nos gustó mucho que la tengan abierta. Pudimos ver la buena organización entre las cocineras, la limpieza impecable y sobre todo la profesionalidad con la que trabajan. Llevábamos mucho tiempo queriendo ir y nos arrepentimos de no haber ido antes, pero sin duda a partir de ahora será una parada obligatoria cada vez que volvamos a La Palma. ¡Seguid así y por mucho mucho tiempo más! Gracias.

El sitio que elijo siempre para celebraciones especiales, un seguro de calidad y buena comida

Cocina elaborada y original. Las croquetas riquísimas (tuvimos que repetir), los quesos, etc. Todo fue perfecto y los camareros nos atendieron muy bien.

Sólo tengo cosas buenas que decir. El personal súper amable, sitio acogedor y la comida exquisita. Todo me encantó pero las zamburiñas son una cosa espectacular, plato que tienes que probar sí o sí si vienes aquí. En un momento de la noche vino la chef mesa por mesa para preguntar qué nos había parecido la comida, súper cercana y simpática. Restaurante obligatorio si vienes a La Palma.

Muy grata experiencia. Estábamos solos para comer (viernes). Atención muy buena. Carta diferente y variada. Platos sorprendentes y bien presentados y ejecutados. Croquetas de langostinos muy ricas, croquetas de ensaladilla rusa ¡guau! Zamburiñas muy ricas y diferentes, brioche con carabinero también muy sabroso. Relación calidad-cantidad-precio un poco elevada.