Casa Feliu en Santa Susanna

Siempre que vamos a santa susana vamos a comer al restaurante comida estupenda la verdad volveremos a repetir

Estuvimos en el restaurante y muy buen menú por 15'95€ , la verdad que la estética exterior nos hizo dudar ya que se ve un hostal de muchos años de antigüedad. Pero igual que un libro, no se puede juzgar por la portada... El servicio fue impecable y una variedad de menú muy grande, pescado fresco. Si os viene de paso recomiendo parar a comer.

Comida catalana tradicional Un trato muy familiar y agradable Los menús son muy completos y muy buena calidad y presentación Todo muy limpio y siempre hay sitio para aparcar Es para volver sin pensarlo Además si celebras un cumpleaños y avisas con tiempo te regalan la tarta. Vale la pena

Can Feliu ha sido siempre uno de esos restaurantes de referencia en la zona, de los de toda la vida, ideal para reuniones familiares y/o de empresa, amigos... donde se solía comer muy bien por poco dinero, variedad y abundancia, cocina tradicional sencilla pero bien ejecutada... Por eso me ha decepcionado tanto volver, después de unos años sin haber tenido la oportunidad de hacerlo, para comprobar lo mucho que ha cambiado desde entonces, lamentablemente para mal... 😔 Mis compañeros de trabajo y yo optamos por el menú del día. Por dónde empezar... Las patatas fritas de guarnición eran clarísimamente congeladas, la ensaladilla rusa más de lo mismo. Varios de mis compañeros pidieron solomillo de cerdo y tuvieron que enviarlo de vuelta a cocina por que chorreaba sangre al cortarlo. Pedir un cambio de guarnición (patatas fritas por judías blancas) fue toda una odisea, y mi pluma ibérica llegó a la mesa fría y seca, demasiado cocinada. Sólo habían dos opciones de postres caseros y no eran nada del otro mundo, la crema catalana no tenía demasiada consistencia ni buen color (color más bien "artificial") y el pudín de la casa estaba bueno, sin más. La opinión general fue rotunda - por 15'90€ esperábamos mucho más. El servicio fue rápido pero nada amable, poco ojo al detalle, tuvimos que pedir más pan en varias ocasiones, así como condimentos. En definitiva y cómo he mencionado al principio de mi reseña, una pena que lugares tan emblemáticos y con tanto potencial, pierdan su esencia.