Restaurante El Filandón-Gijón en Gijón

Hoy hemos ido a comer en familia ,tanto el trato de los camareros como el servicio de ellos ,ha sido estupendo ...y bueno la comida todo genial ,así que le ha gustado bastante mi experiencia allí .seguro que repetiré .

Se come estupendamente muy buen servicio muy amables todos. Lo recomiendo sin dudar.

Chuletón espectacular, y un menú calidad precio perfecto, lo descubrimos gracias a los compañeros de la jaguar Para repetir a menudo

Es acogedor, en un entorno muy bonito. El servicio es muy bueno, y la comida espectacular.

Hemos ido dos parejas con niño y bebe a comer este domingo, pedimos 2 piernas de cabrito lechal, el sabor fue excepcional (a mi que el cabrito no me gusta nada, lo probe estaba buenisimo) se apreciaba perfectamente que era lechal ya que era pequeño, con una guarnicion de patatas panadera, si vais a pedir este plato recomiendo que pidais un entrante, no os defraudara. Y luego por otro lado nosotras dos pedimos el menu de arroz con Bogavante, que viene con un vino blanco y de primero nos pusieron caliente un pastel de merluza que personalmente a mi no me gusto, me parecio saladisimo con sabor a pescado pero sin embargo a los otros 3 les parecio expectacular (por lo q la rara era yo), luego un plato de Jamon cartado a maquina por que todos los trozos eran iguales y digamos que era un jamon a mejorar (dicho por los 4) pero rico y luego el plato estrella el arroz vino con medio bogavante, es la primera vez que me ponen en un menu para dos medio bogavante a compartir mientras una come la cabeza la otra el cuerpo y pinza, eso me parecio mal, ya que pone menu de arroz con bogavante y siendo para dos tendria que ser uno entero no medio, como ya dije fue lo que me sorprendio para mal, tambien le faltan por tener el tenedor para marisco ya que solo tenian pinzas para romper pero aun asi a sido EL MEJOR ARROZ QUE HE COMIDO EN MI VIDA, asi que lo compensa pero con creces, el sabor expectacular, no estaba ni pasado ni pegado, un arroz suelto y delicioso sin mas que eso arroz y bogavante al menos para la vista por su puesto tendria su refrito y demas y en gijon he probado los de la mayoria de sitios afamados y nada que ver, y luego el postre solo me daban a elegir un browni de chocolate con bola de vainilla y a mi como no me gusta pedi si podian cambiarmelo por otro pero no podian asi que pedi el browni para mi marido y el me pidio para mi la tarta de queso que es el unico postre que yo pido, bueno pues ni que decir tiene que tengo una lista de las mejores tartas de queso y la he situado o en la primera o en la segunda posicion esta reñida, una tarta hecha en horno, cremosa y con sabor a queso, esta brutal y ademas un trozo enorme que medira sin exagerar 6 cm o mas de altura acompañado de una bola de helado de melocon delicioso para mi que tambien es casero por que su sabor era riquisimo. En definitiva tengo muy claro que ha sido todo un descubrimiento este lugar, no solo tengo claro que volvere si no que lo recomendare. Por cierto pedimos un ribera del duero, Pruno no os decepcionara

Muy buena calidad en el producto y atención de todos los profesionales. Buena selección de carnes. El cordero exquisito. Totalmente recomendable.

Excelente! Trato, comida muy buena, Buena orientacion a la hora de pedir. Calidad precio expectacular. Volveremos!

Muy caro para lo que comimos, yo pedí bacalao con pisto y venía una raspa de bacalao cubierta con pisto. Me fui con hambre, la verdad. Los helados estaban muy buenos, y las croquetas también. El servicio muy amable y atentos.

Restaurante de categoría, llevamos muchos años comiendo la excepcional comida de Fredo. Desde sus famosas paletillas de lechazo, cabrito y cochinillo al horno. La última visita en familia un estupendo arroz con bugre y chuletón madurado. También destacar sus buenos menús diarios por un precio muy moderado. Su bodega muy cuidada y la profesionalidad en sala. Muchas gracias Fredo por esos platos que preparas con tanto cariño y profesionalidad.

Carne muy buena, pedimos 2 entrecot y nos cobraron más de lo que ponía la carta el camarero muy seco y desagradable, el queso cabrales estaba congelado , y también se olvidó de traernos una ración de pastel de cabracho yo comí bien pero quedé justo caro para lo que comí.