Mamma Mia en Noia

Nos encantó! Pedimos pizza vegetariana con ingredientes extra. Riquísimo todo! El lugar es muy bonito y el personal que nos atendió, muy amable y feliz de atender!

Comida muy buena a un precio inmejorable con el menú del día

El lugar a priori es llamativo, en la entrada tienen un rótulo de neón un tanto retro, que con una flecha te invita a entrar. Por dentro el local sigue con la misma dinámica, recreando casi a la perfección una cafetería de los años 80, una pena que los asientos disque acolchados estén sumamente desgastados. Fuimos un grupo de cuatro personas a comer a las 14:00, me sorprendió que no hubiese nadie más a parte de nosotros. Una vez que decidimos la comida, el camarero nos informó de que por 0,20€ más podíamos optar a que la bebida fuese recargable (un dato que quizá a más de uno le empuje a venir) y así hicimos. 2,40€ por poder servirme las veces que quiera me parece más que justo. Todo se tiene que pagar una vez lo pides, y tras ello, te dan una alarma portátil con un número, que te lo llevas a la mesa, cuando suena, tienes que ir hasta la barra a recoger tu comida, siendo básicamente la sistemática que utilizan algunas de las grandes franquicias de Fast Food. Así que tened en cuenta que no hay servicio en mesa. Yo me pedí la hamburguesa Estelar por 7.40€, en la cual destaco, que viene con un generoso trozo de queso de cabra. Además de, una ración de patatas fritas (no lo pone en el menú). La presentación está decente, te viene la hamburguesa con un palo para que se sostenga bien, la ración de patatas en una bandejita de cartón, todo esto en una bandeja con una blonda de papel de recuadros blancos y rojos, respetando el diseño del lugar. En lo personal, no es de mis favoritas, considero que la carne tenía un sabor excesivamente fuerte, omitiendo así, los demás sabores, por lo que apenas la disfruté. Y en cuanto al servicio no tengo quejas, fueron bastante gentiles.

Pizzas y pasta muy ricas, calidad precio está genial, así que recomendable!

Pizzas buenísimas!!! El camarero nos recomendó las cantidades y todo fenomenal a un precio muy ajustado.

Increíble! Mi madre y yo nos despistamos y llegamos bastante tarde (eran las 15:40 y cierran a las 16:00) nos trataron super bien y cuando nos disculpamos por venir a estas horas nos trataron de mil amores, tanto el camarero como el cocinero, dos grandes! Una comida deliciosa, un local limpio, un ambiente tranquilo y puedes ver como cocinan en el horno delante tuya, la verdad 10/10. Mi madre y yo nos vamos muy contentas y satisfechas, de seguro será nuestro nuevo sitio de referencia para salir a comer!