MamaQuilla en Madrid

Salimos con una sensación agridulce. La comida estuvo bien, han cambiado la carta hace unos días y parece mejorada. Muy rico el brioche! Platos mediterráneos con toques latinos. Sirven un aperitivo que cobran sin avisar, por supuesto pedimos que nos lo quitaran. Nos quedamos sin postre, lo marcharon en comanda y a los 15 min nos dicen que se les ha acabado. El camarero insiste en retirar los platos sin haberlos acabado al igual que las bebidas, es un poco desagradable tener que estar diciendo que te deje comer y beber tranquilo. El ambiente es una gozada, poder cenar con la pareja de baile haciendo el show cada 20-30 min aprox. Se disfruta de una buena cena con amigos pero tendrían que mejorar el servicio ya que es importante sentirse a gusto.

Nuestro sitio de referencia para familia y amigos. Atención inigualable. WILL recomendó lo que mejor se adaptaba a mis alergias. El sitio y la puesta en escena de los espectáculos inigualables. Repetiremos sin duda.

Fuimos a cenar, los cócteles son suaves experimenté 3, la carta con pocas opciones y los platos bastante caros no traen acompañante tampoco te lo mencionan los que te atienden, el sabor no está mal pero pensaba que por el precio serían mejor, el ambiente del local la música y el show está bien sin embargo deberian ampliar la carta y también explicar que todo es pequeño.

Encantada!!! Un ambiente súper animado. La comida muy buena. Tienen unos pequeños show a cada rato y la verdad que aunque no se ven bien desde todos los ángulos los chicos tratan de pasar por todas las mesas para animar. Y la verdad… que lo logran!!! Luego de cenar ponen un poco de música y te pones a bailar!!!!!

Muy buen lugar, y la música en vivo inmejorable

Buen ambiente, cocina de fusión, muy rica, y actuaciones en directo. Para no perdérselo...

La verdad que iba con expectativas altas y me dejó mal sabor de boca. La comida un tanto elevada para la elaboración y calidad que tiene. Fallaron bastante en nuestra mesa con los tiempos de comanda y atención, pero aún así supieron rectificar. El show está muy bien, para celebraciones, como despedidas está bien.

Lo peor de este sitio es que se come bastante bien. Personalmente que las cenas se amenicen con bailes y música y cerca de las 11,30h directamente la gente se levante como un bar de copas no me gusta. Y tendrá su público. Poca luz en las mesas y algunas demasiado juntas. Espectacular el aguacate en ceviche y el taco de la casa. Algo menos el pastor. Precios algo altos.

Buen ambiente y mejor servicio, pero comida muy mejorable sobre todo para el precio. La presentación de los platos muy buena, pero en esencia salvo el pulpo a la brasa a los platos les faltaba sabor, algo de gracia. Cantidades pequeñas en platos grandes, sin ser nada especial. Hay mucho margen de mejora. Relación calidad precio muy baja, 5 euros por ejemplo por una zamburiña totalmente insulsa no merece la pena. El local está muy bien situado no obstante, tiene mucho potencial.

Se trata de un restaurante que se dice panamericano, pero que en realidad es un peruano, de donde son sus mejores platos como las vieiras o las croquetas, mientras que la ensaladilla rusa y los tacos especialmente el de pastor son mediocres (mejor el de soft crab). Lo mismo pasa con los cockteles muy bueno el pisco sour, mediocres el resto. Es una pena la musica alta y los dos bailarines que se contornean sin aporar nada excepto ruido.