Edulis Jatetxea en Maruri-Jatabe

Es la primera vez que voy,me ha gustado,vplvere

Estuvimos comiendo y nos trataron mu y bien. Buen servicio y buena comida.

Todo muy buena ymuy buena calidad ,para volver a repetir

El menú del día por 20€ es buenísimo calidad precio,

La comida muy buena, todo calidad. El servicio inmejorable, mucha simpatía y profesionalidad, dándonos toda clase de explicaciones a las preguntas sobre los platos. Si hay algún pero es el ambiente del restaurante que es una terraza cerrada, eso sí, totalmente acondicionada. Recomendable 100%

Se come bien. Algunas cosas muy buenas. Caro

Muy buena comida, buenas elaboraciones y bonitas presentaciones de platos, para repetir

Hemos ido varias veces (cuando el bolsillo lo permite ..) porque los platos están elaborados con muy buenos ingredientes y cuidan que sean de temporada. La atención siempre es atenta y admiten perretes en la terraza acristalada. Pero está vez se queda en las 3 estrellas por cobrar el agua del grifo filtrada.

No es que fuese uno de los mejores días de Euskadi para salir a comer, lluvia, niebla, día oscuro y triste, nunca había estado comiendo aquí, sí que frecuentemente paso por al lado en mis recorridos de bici. La primera sorpresa es la terraza acristalada (y bien calefactada) que tienen, limpia, ordenada, las mesas bien dispuestas para poder comer tranquilo y con bastante intimidad, buenas sillas, buena mantelería y cubertería. En cuanto a la comida, otra sorpresa más, buenos entrantes, en nuestro caso jamón (pan con aceite y tomate), morcilla (pimientos rojos y puré de patatas), revuelto de setas y rabas (aquí mi único punto negativo, si mejorasen las rabas, el menú sería perfecto). Como platos principales fueron el bacalao y los txipirones (en su tinta gloría bendita!!!), el pan muy bueno, vino, postres y algún trago largo y la última sorpresa fue el precio, comer seis personas en Euskadi a la carta por menos de 400 € es increíble, aconsejable 100%. Eskerrik asko!!!!

Fuimos un domingo a las dos. Nos dieron las cartas y a la hora de cogernos nota nos dijeron que no había varias cosas y tuvimos que cambiar lo que queríamos. Al de unos minutos vuelve la camarera que teníamos que volver a cambiar cosas porque no había algunas cosas mas y tuvo que volver una tercera vez por lo mismo. Los entrantes estaban buenos, el micuit y las croquetas muy ricas, los solomillos demasiado hechos (habiéndolos pedido en su punto) con un sabor insípido y la tarta de queso mas seca que el desierto del Sahara ( y la ración 9€! Ni que fuera de La Viña) Precios en general desorbitados. Yo ni repetiría ni lo recomendaría.