Depikofino en Sevilla

Muy buena la comida.Pedimos ensalada de rulo de cabra y codillo de cerdo.Los camareros muy profesionales y agradables

Tapas increíbles, la comida que comimos fue muy buena. Definitivamente regresaría aquí. Además, el personal fue muy servicial con mi alergia a las nueces. Una gran selección de platos de tapas. El solomillo de ternera gallega tiene que ser una de las mejores piezas de carne que he probado en mucho tiempo y está perfectamente cocinado.

Comida normal, nada especial. Probé una variedad de cosas en el menú: nada fue increíble / nada fue malo. Precio acorde a la calidad en mi opinión. No hay mucho ambiente durante el día.

Tapas deliciosas, combinaciones únicas de favores, excelente servicio, precios razonables. Nos gustó tanto que fuimos dos veces durante nuestra estancia en Sevilla ❤️

Buenas y originales tapas. Buen precio.

Me encanta, tienen una camarera super simpática!!!!

Calidad, tapas originales, terraza acogedora, muy buena relación calidad/precio, además tienen carta en inglés.

Lugar agradable, comida fantástica y personal muy amable.

Buscábamos algún lugar por la zona para tomar unas tapas por cumpleaños y nos pareció atractivo e interesante por la carta y fuera de carta. Local con terraza agradable y salón diferenciado en dos espacios, uno más íntimo y apartado de zona principal y el otro que forma parte de la cabecera del local, algo más jaleoso. De ambiente acogedor y decoración rústica urbana, su oferta gastronómica está basada en cocina internacional, teniendo presente platos de cocina tradicional innovada. Éramos un grupo de cinco amigos y decidimos pedir todo a compartir. Nos quedamos con las ganas de probar varios fuera de carta ya agotados, finalmente nuestra elección: - Croquetas de caña de lomo y setas con parmesano, ambas crujientes, doradas y cremosas en su interior. Las de caña de lomo suaves y más bien tontas, nos decepcionó. Sin embargo, las de boletus muy ricas, nos gustaron tanto que repetimos. Muy recomendables las croquetas de boletus. - Gyozas de verduras, relleno sabroso y contundente. Me gustan las que llevan un toque de plancha u horneado que aportan toque crujiente, como estas. - Cerdo sumiso, solomillo de cerdo con salsa elaborada a partir del propio jugo de la carne. Carne tierna y jugosa, salsa no destacable. La presentan acompañada de chips de batata. - Tataki de pato con compota de fresas y guindillas, correcto, pero no destacable. - Huevos rotos con morcilla de Burgos y lascas de parmesano, combinación acertada y bien rica. Algo corto de sal, pero lo solventamos sobre la marcha, nos gustó bastante. - Queso, el mejor postre sin duda. Correcto. En cuanto a carta de vinos, aparentemente es amplia, pero quizás fue puntual del día que estuvimos, pero cierto es, que lo que nos ofrecieron era bien escaso y teníamos poco margen incluso para pedir botellas. Es más, solo ofrecían un tipo de vino tinto por copas (bastante mediocre), cuando en carta aparecen varios disponibles. Lo anteriormente comentado junto a un par de rondas de bebidas y dos botellas de vino ascendió a poco menos de 160€. Como conclusión puedo decir, que si se da de repetir por circunstancias repetiré, pero intencionadamente no lo haré.

Hacia un par de años que no íbamos por Sevilla y por lo tanto, que no visitábamos este sitio. Lo que antes eran tapas se han convertido, sin advertirlo, en platos, por lo que nos encontramos sobre la mesa un risotto y un socarrat de los que dejamos la mitad y pagando casi el triple que si fuesen tapas. El camarero nos ofreció un taper para llevarnos las sobras al hotel. Ademas de esto, servir antes a unos comensales que llegaron después que nosotros y servir la carne, solomillo al whisky , antes que un arroz con la escusa de que el arroz tarda más en hacerse hace que el servicio lo consideremos mediocre