Cañarejo Gastrobar en Lorca

Buscavamos un sitio para comer y lo hemos encontrado p google p casualidad. Muy recomendable, comida muy buena, trato inpecable, lugar muy agradable. Si tenemos q volver por allí sin duda repetiremos.

Todo de 10. Los camareros muy agradables y la comida de la mejor que he probado en mi vida, en serio, es todo un lujo

Comimos super bien , buen trato arápidos la comida exisita en todo el caos de semana santa que tenian pobres pero el mejor ha sido miguel angel gracias por estar tan atento fue el mejor y Ana tambien lo recomiendo

Te sientes como en casa y encima la comida es de 10, que mas se puede pedir?? Os lo recomiendo 100%.

Buen descubrimiento. Relación calidad - precio buena. Amabilidad y buen servicio. Lugar agradable. Chupitos Detalle de la casa. A mejorar: espera para tomar y servir postres y cafés. Hemos probado muchas cosas: Ensalada cesar y cañarejo revisitada: normal. Gambas ajillo ración generosa y buenas. Caballitos extra grande Buenos. Rollitos Salmón Normal. Huevos trufado muy buenos (un detalle que los mezcle el camarero). Flor de alcachofa no la volvería a pedir. Croquetas de jamon ibérico muy buenas. Queso frito con mermelada bueno y ración muy generosa. Calamar de potera y entrecot normal. Postres bien. Asiáticos bien. Era nuestra primera visita y repetiremos. Trato muy cordial y amable de Miguel. No ha habido nada que nos sorprendiera pero todo estaba bien. Hemos intentado probar un poco de todo pero lógicamente nos han quedado muchas cosas por probar

Súper excelente una comida inmejorable y un servicio aunejor

De lo mejor de lorca. Muy buena calidad precio. Servicio muy profesional Sitio muy tranquilo y acogedor

Carta variada, con buen producto, trato exquisito en un local acogedor, la única pega, por poner alguna, es que al llegar tenían el suelo recién fregado y eso hacia que el ambiente fuera más fresco de lo normal.

Trato estupendo, las croquetas exquisitas al igual que la presa de bellota, los mejillones algo menos. Con ganas de repetir

Un lugar encantador, exceptuando hace dos fines de semana que había en el interior del local una cantidad de moscas en demasía, que no te dejaban en paz y era un incordio en la ingesta de los alimentos.