Bel Mondo en Madrid

Sólo por el local es digno de ir, pera la comida bien, pero sin tirar cohetes. No es en el mejor italiano que he comido ni mucho menos, aunque el tiramisú es bastante destacable. Pero en general, el sitio es bonito aunque no es la mejor atención por parte del personal que está sobrecargado.

El sitio tiene un ambiente maravilloso. La atención es excelente. La comida es buenísima y mucha cantidad. Para repetir.

El local es muy bonito, como siempre, la comida buenísima y el trato exquisito, volvemos el día 15,,,

La decoración es espectacular , no le falta detalle , la atención también fantástica y bastante rápido con el llenazo que tenían. Tenía una expectativa bastante alta en cuanto a la comida que , desgraciadamente no se cumplió, no estaba mala pero no era lo que esperaba. La experiencia fue bastante incómoda ya que no dejan ni la más minima separación entre las mesas , prácticamente estas comiendo con desconocidos , lo que separaba la mesa de la pareja de al lado era una cubitera que entró a presión entre las dos mesas, la verdad que esa falta de espacio/ intimidad me hizo no poder disfrutar de la experiencia y no querer repetir

Gran ambiente y comida deliciosa ☺️

Qué lugar tan impresionante con una experiencia verdaderamente organizada. Definitivamente nos sentimos como si nos hubieran trasladado a la costa italiana para disfrutar de "la dolce vita". Todo el personal fue increíblemente amable y sonriente y nos sentimos atendidos. La comida y el servicio son impecables. ¡Ve, no te arrepentirás!

Fuimos por una celebración especial. La comida riquísima, la carbomamma una pasada y las burratas igual. El cocktail no me gustó tanto. No le doy un 5 x la mesa en la que nos ubicaron… muy escondida, oscura y con vistas a la parte interior de la barra donde servían algunas bebidas.

Maravilloso todo, desde la comida, la atención, la decoración y el ambiente. Comida italiana 100% El tiramisú de los mejores que he probado. Las pizzas buenísimas con una masa fina y crujiente, y un capuccino excelente.

Estuve comiendo con mi pareja en este restaurante después de llevar un tiempo queriendo ir. Es un sitio muy bonito, con una decoración muy original, moderna en algunas partes, más clásica en otras. Nosotros teníamos la mesa en un salón-biblioteca. Las mesas no están muy separadas unas de otras, al menos las que están pegadas a la pared con banco corrido. Nos sirvieron unos panes con una salsa tipo alioli como aperitivo, que se cobra pero de puedes repetir tantas veces como quieras. Luego pedimos un principal cada uno, espaguetis a la carbonara (carbomamma) y yo pedí tortelli al fungui. Los espaguetis estaban muy buenos y los tortelli tenían un sabor muy potente a setas. En el postre nos decepcionó que muchos no estaban disponibles, así que pedimos el postre "Dolci &Espresso" que consistía en un trío de dulces: tiramisú, crema catalana y arroz con leche y un café espresso. Estaban bien, aunque la crema catalana parecía tarta de limón. Me gustó porque se servían en unos cuencos con forma de cabeza de animales y me resultó muy original, sin embargo tenían poco fondo y por consiguiente poco postre. La atención fue muy buena, los camareros (que eran italianos) muy simpáticos y atentos. El local tiene muchas escaleras, así que para una persona con movilidad reducida no es cómodo ni accesible (a menos que tengan algún acceso con ascensor que no vi). Un sitio bonito y agradable.

Expectacular!!!! Muy buena comida, experiencia, sitio, camareros…. Muy bueno el BOOM Boom Ciao, postre, merece la pena pasar por aquí