Bailara Restaurant en Bidania-Goiatz

Bonitos platos de cerámica, platos pequeños de sabor intenso, bien presentados, también el vino. La mejor opción para quien pasa por el hotel-castillo.

Experiencia irregular, una pena. El restaurante tiene cuatro mesas por lo que se puede esperar un trato esmerado. Tal vez por ser puente o por que éramos los únicos clientes en el servicio de comida, al llegar a nuestra hora no había servicio en el restaurante y tuvimos que ir a preguntar a la recepción del hotel (también estábamos alojados allí). Después de 10 minutos esperando, vinieron. La comida es bastante sabrosa sin ser épica, con algún plato brutal, aunque los aperitivos no cuadran con el resto de los pases. SPOILER ALERT: El ravioli de maíz negro espectacular, el pure con anguila y cebolla brutal, la almeja gallega con alcachofa sorprende pero no remata. Los principales un poco escasos y menos sorprendentes. Postres muy ricos aunque es un poco repetitivo el uso de helado en ambos. FIN DE SPOILER: La pena fue el servicio, ya que nos dejaron desatendidos (y éramos los únicos clientes del turno de comida). Tras la comida, y una vez servido el café y petit fours, se olvidaron de nosotros. Estuvimos 15 minutos desatendidos, con ganas de una copa, hasta que entendimos que nos habían abandonado sin previo aviso. Tuvimos que ir de nuevo a recepción a decir que estábamos abandonados. Se disculparon y nos atendió otra persona para cobrarnos, ya que el personal de nuestro servicio se había marchado sin aviso ni despedida. No tuvieron más atención que disculparse. En fin, comida notable + servicio malo = experiencia regular. Una pena.

Un lugar mágico ,tranquilo y agradable . Con una comida top ,un servicio inmejorable y habitaciones super cómodas que te trasportan en el tiempo por la historia que hay se encuentra . Soy los mejores

Pienso que el gran lujo es como la felicidad: nunca llegás a un techo que digas "Ya no más". En este muy elegante restaurante Bailara les garantizo que el 👉 techo está alto, muy alto. Sublime!!