Abarike en Gijón

Un lugar especial, con mucho encanto, trato exquisito y comida excelente. Sin lugar a dudas repetiremos. Nos encantaron su versión de las Gildas, extraordinarias! Las ostras, la vieira y la mariscada....todo excelente! Ah, la matequilla con plancton pura delicia (y casera). Tanto Lara, como el equipo fantástico nos hicieron sentir como en casa.

Tenía ganas de probar y la verdad que ha valido la pena, muy buena comida en cantidad razonable y precio correcto, carta de vino escasa pero de calidad. La carta de postres justilla y para mi un poco floja de sabor y calidad pero así todo bien. En resumen merece la pena la visita

Toda una experiencia de sabores. Si te gustan los productos de mar es imposible que no te guste su cocina. El sitio es chiquitito pero muy agradable, con una decoración muy acorde. Fuimos tres personas y salimos encantados y con ganas de repetir.

¿Fan de los mariscos? ¡Entonces tienes que probar Abarike! Es un pequeño tesoro en la ciudad donde cada plato es una fiesta de sabor. Los menús degustación son una pasada, llevándote por un viaje de puro mar. Todo fresquísimo y servido en un ambiente super acogedor. El equipo te trata como de la familia y siempre te deja con ganas de más. Si lo tuyo es el buen comer y te mola el rollo del mar, Abarike es tu sitio. ¡No te lo pierdas!

El restaurante "Abarike" ofrece una experiencia gastronómica única con su enfoque en pescados y mariscos al estilo omakase. El término "omakase" significa confiar en el chef, y aquí, los clientes pueden esperar una selección cuidadosamente de platos que resaltan la frescura y calidad de los ingredientes marinos. Desde la presentación elegante hasta los sabores exquisitos, cada plato es una obra maestra culinaria que refleja la habilidad y creatividad del chef. Además, el ambiente del restaurante complementa perfectamente la experiencia, creando un ambiente acogedor y sofisticado que invita a los comensales a relajarse y disfrutar de una comida inolvidable. En resumen, Abarike es una excelente opción para aquellos que buscan una experiencia gastronómica refinada y auténtica centrada en los sabores del mar.

Llegamos un sábado de forma espontánea y sin reservas y nos sentamos en el gastrobar. Felicitaciones por eso! Me encantó la disposición de los asientos de estilo japonés y la interacción directa con los chefs. Además, el ambiente es muy tranquilo y acogedor. Teníamos el menú de mariscos de seis platos Marea Baja para el almuerzo. La mayoría de los platos eran geniales, si no extraordinarios (rape con setas, ¡un plato muy valiente!). Todos los ingredientes locales respetando la cocina asturiana. A la tarta de queso hecha con queso local asturiano (de nuevo muy valiente) le faltaba algún arreglo de frutas o sorbete/couli en mi opinión. También en uno de los platos me encantaría ver un trozo grande y gordo de marisco como una cola de langosta o un langostino. Pero, de nuevo, el precio del menú era de solo 50 €, lo cual es un valor muy justo para esta categoría de comida. Considerándolo todo, una experiencia muy agradable y definitivamente regresaré para el menú de 12 platos la próxima vez.

Comimos ya el degustación 2 veces y tenemos ganas de volver de nuevo. Lo de cambiarlo a diario es una idea fantástica por qué siempre comes cosas nuevas y recién llegadas al puerto. 5 estrellas

Tenéis que ir. Faltan palabras. Muy pero que muy recomendable.

Hemos comido mi mujer y yo el menú marea baja que en esta ocasión estaba compuesto por; - Gilda de gamba. - Nigiri de lubina y carabinero. ' Chili de centollo. ' Carbonara de calamar y anguila ahumada. - Dorada salvaje y calabaza. - Tarta de queso. Materias primas de primera calidad y tratadas con mimo = éxito seguro. Si a todo ello unimos un gran servicio de sala y un precio muy contenido, nos encontramos un restaurante totalmente recomendable.

Servicio excepcional Sitio acogedor y pequeño, no necesita más. Pedimos el menú corto, quedamos satisfechos. Uno de los platos nos pareció excesivamente ácido, ocultando el atún rojo del cantábrico, y el rape con la salsa de setas, a pesar que la salsa estaba muy buena y el pescado también, no es una combinación agradable a nuestro paladar ya que mata los sabores de cada uno. Pero esto ya es personal, y una sugerencia. El postre muy rico.