Los mejores restaurantes de cocina mediterránea en Llanera

20/05/2024: Como muchos otros grandes restaurantes, en el momento que ya tienen buena lista de espera por su reputación, empiezan a no cuidar/mimar a los clientes. No me refiero a sus empleados que son de 10, sino de la dirección. Despues de celebrar la boda y 2 comuniones por mi parte, ademas de mas bodas por mi familia, en esta ultima comunión de mi hijo, nos visitó un familiar con su mujer, solo estuvieron 30 min antes de empezar el baile y la barra libre, solo tomaron 1 café cada uno, se aviso de que marchaban y a la hora de cobrar... sorpresa, 44€ por 2 cafés. Por su parte dicen que es lo que hay (como tenemos a la gente haciendo cola) nos da igual perder un fiel cliente. A lo cual me parece una total falta de cortesía

19/05/2024: Estuve en una boda y la atención espectacular. Verdaderamente hacia tiempo que no me encontraba con gente tan servicial. Además, yo soy celiaca y un trato personalizado completamente.

19/05/2024: Un local de los de siempre, donde se puede hacer una pequeña compra de víveres y manjares selectos del terruño como cecina exquisita o chorizos, alubias, etc. El local es el bajo de una casa, como se acostumbra en muchos sitios de Asturias, y no pierde la esencia de la casa de comidas tradicional. El mobiliario es recio y con solera, así como el ambiente, algo abigarrado y con carácter muy popular. La cocina de leña es centro de miradas y da ambiente muy agradable a todo (además del gusto de comer comida casera de verdad). El público está en consonancia y es colorido: desde gente trabajadora hasta algunos urbanitas. La comida es excelente. La calidad y cantidad van a la par. No por ser una casa de comidas deja de hacer preparaciones sorprendentes y exquisitas. Uno de nuestros favoritos son los huevos con langostinos y patatas paja. ¡Excepcional! Otro plato que no se debe dejar pasar por alto es el jabalí guisado, pero eso es una sugerencia, que se ve arrollada por otras tantas preparaciones y guisos hechos con maestría y mucho amor. El dueño es un paisano muy amigable, y siempre pendiente de todo. La cocinera (guisandera) es su mujer, cuya mano maestra se nota en todos los platos. El servicio es muy bueno. Pese al lleno habitual no pierden la tranquilidad y siempre andan pendientes de los deseos de los comensales. A veces es difícil encontrar mesa, por lo que se aconseja reservar. El vino blanco de la casa (lo traen de León) no debe pasarse por alto. A nosotros nos sorprendió y es buen acompañante de la comida. Hemos ido varias veces y siempre salimos encantados.

30/04/2024: Solo tomamos el aperitivo pero tiene muy buena pinta