Restaurante BiEnara en Estella-Lizarra

La comida rica y la atención buena. Nos gustó que la cocina está ligeramente a la vista, este punto da confianza. El local no es bonito, obsoleto en cuanto a la decoración, sin embargo dado que el personal ha sido muy agradable y la comida si estaba rica es un lugar a recomendar.

Comí el sábado allí y la verdad es que me gustó muchísimo!! La salsa de las patatas bravas estaba increíble!! Comí el cochinillo y espectacular y probé las carrilleras y madre mía... Totalmente recomendable!!!

Cocina de muy buena calidad en Estella, ¡lo pasamos genial!

Muy bien, comida muy buena elaboración, cantidad y precio. Buen servicio, pero lo de los jueves, poner el ramen todos a la vez hace que sea un poco lento, hubiera tomado otra cerveza y no he podido por qué estaban sacando platos continuamente. Ambiente muy bueno y buen trato.

Durante mi peregrinación por el Camino Santiago, escuché que se podía probar el ramen tonkotsu japonés, así que pasé por aquí. Se parecía más a "Soki Soba" que a "Tonkotsu Ramen", pero también sirven cerveza japonesa, por lo que es un restaurante que debes visitar si te apetece la comida japonesa.

Estaba todo muy rico y una parada obligada si venís a Estella. Recomiendo la hamburguesa, tenía la carne muy jugosa!! La mayonesa era casera y se nota. La tarta de queso también excelente, los otros comentarios no se equivocaban. Volveremos seguro

La comida buenísima, pero el servicio es otro nivel de desastre. La camarera no sabe si hay el menú del día o no (en cuando hay una pizarra con el menú puesto), estresadísima y confirma que si hay menú 10 minutos después… Empieza servir los segundos, cada 10 minutos nos sirven 1 de los 4 platos… después de servir 3 churrascos a la mesa nos dice que ya no queda para el último plato de churrasco, cambiamos al rabo de toro, 10 minutos después se dieron cuenta que no lo han marchado el plato. En fin, una pena.

El cocinero y la comida es muy,muy buena, pero el servicio, alguno de ellos dejan bastante que desear.

Tienen servicio de restaurante de jueves a domingo (el domingo por la por la mañana). Los fines de semana solo tienen carta, no tienen menú. Elegimos tres platos, todos ellos para compartir. Comenzamos con queso de cabra a la brasa con cebolla caramelizada, aceite de miel y sésamo tostado, seguimos con pulpo a la brasa con patata parmentier, pimientos del padrón y mahonesa chipotle y terminamos con cochinillo a la brasa con su salsa, guarnición otoñal de ciruela pasa, orejón y castaña y puré de boniato. Los tres nos encantaron, a resaltar los acompañamientos de cada uno de ellos todos muy logrados, dejamos los platos limpios. De postre también compartimos una tarta de manzana con helado y una crema de queso con frutos rojos que pedí los pusiese aparte y muy amablemente los colocaron en un recipiente diferente. Mesa amplia con mantel y servilletas de papel. Te ofrecen agua en jarra y en botella, otro buen detalle. La única pega es que es bar comedor y como fuimos pronto había bastante gente tomando el aperitivo y metían mucho ruido. Además como tiene que servir los aperitivos el ritmo de salida de platos fue un poco lento. Muy atentas las personas que nos sirvieron. Con una copa de vino y dos cafés salimos alrededor de 35 € por persona, muy buena relación calidad-precio. En resumen disfrutamos de cada plato y sus acompañamientos.

Por fuera solo parece un bar más pero dentro hay una gran cocina y una variedad de platos que vale la pena probar. Comimos croquetes, wok de verdures muy bien hecho, hamburguesa, carrilleras, tacos, magret,... Todo buenísimo. Enhorabuena, lo hacéis muy bien.