Restaurant Esquirol en Llívia

He ido a comer un par de veces y siempre ha estado muy bien. El servicio es muy eficiente y amable. Muchas gracias

No estuvimos en el hotel, sino en el restaurante. Una atención maravillosa por parte de los camareros y una comida espectacular.

Llegué al hotel Esquirol de Llivia el 11 de abril de 2024, salí el 14, 3 noches, 2 habitaciones (n° 7 y 8).. Falta hacer la limpieza de las habitaciones, juntas de ducha y polvo en las puertas, el Cafetera de cortesía (no en las 2 habitaciones) justo a nuestra llegada, al día siguiente no hay realimentación (ni vaso ni dosis de café, aunque solicitado, habitación 8). Ropa de cama de buena calidad, en 1 habitación la cama no ha sido rehecha (habitación 7)... no hay cristales dentales. La televisión de una habitación (n°7) no funciona, tuvimos que ajustarla toda nosotros mismos. El desayuno... se sirve no antes de las 8 am, un poco tarde, no mucho, pan y mantequilla recién salidos del congelador. 1 croissant y sin reposición, zumo de naranja industrial nada más, plátanos que no dan ganas a la piel negra que lleva días y días ahí, jamón de campo que lamentablemente tuvo demasiado éxito y no se repuso. Cenas... platos bonitos y en buenas cantidades, ojo que no os lo contamos... la garrafa de agua cuesta 2,95 euros, un poco cara para el agua, que es vital. No hay salón para jugar a las cartas, las bicicletas se guardan junto a las sillas y el sofá, y en la entrada de las escaleras de acceso a las habitaciones. FLEE FLEE todavía recomendado por Petit Futé. El personal joven es muy amable y sonriente, una hermosa terraza para disfrutar del sol, estacionamiento gratuito frente al hotel. No muy lejos del Pas de la Casa

He estado alojado una noche. El desayuno incluido está bien y variado. Lo que más quiero destacar es la flexibilidad y agradezco mucho que me hayan dejado salir una hora más tarde, para poder acabar la ruta y dar una ducha. Han sido siempre amables en recepción y restaurante. También puedo decir que he ido a comer tarde 15:30 y he sido atendido.

Sólo almorzamos... Sencillo... sobrio pero eficaz.

Muy buena dirección, un menú por 22€ con productos locales. Trinxat y manitas de cerdo o bacalao, ¡excelentes!

Bien, el menú un poco caro por lo que comes, los segundos estaban regular, en conjunto se puede recomendar.

Admiten mascotas en el interior del restaurante, cosa que se agradece. También hay terraza exterior. Comimos platos combinados muy bien presentados.

Fuimos a comer entre semana tras haber hecho una excursión por la zona, nos atendieron rápidamente y pudimos acceder con nuestro perro (grande pero muy tranquilo). La comida estaba muy buena, quedaba poca variedad de postres a la hora que fuimos pero nos ofrecieron además del postre un chupito delicioso. Instalaciones, servicio, lavabos, también muy bien. Volveremos!

Buen restaurante pero clientes ruidosos.