ReComiendo en Córdoba

Maravillosa experiencia. La comida exquisita, el servicio espectacular, Sara fue fantástica. Y valoramos mucho el hecho de que el propio chef pasara en varias ocasiones por la mesa a preguntarnos que nos estaba pareciendo e incluso explicarnos algunos de los platos

Los sabores de siempre en unos formatos muy originales y con una presentación perfecta. Inolvidable. Lástima que solo se puedan dar 5 estrellas.

Por dos veces he disfrutado este magnifico restaurante , una de las mejores relaciones de calidad / precio , gustos , presentaciones , ambiente todo de 10

Inmejorable y sorprendente como siempre y una vez mas, Volveremos!!

Restaurante recomendado por Michelin situado en un barrio de Córdoba alejado de la zona antigua. Hay que llegarse en coche, pero no hay problema de aparcamiento en ese barrio residencial. El local tiene una decoración moderna y rompedora. El servicio es muy atento y profesional, a la altura de cualquier estrella Michelin. La carta nace de una mente muy creativa y con mucho recorrido que se basa en productos básicos de la Tierra cordobesa (poniendo en una altar al aceite de oliva y al pan) y les da una vuelta o dos tras pasar por su cabeza. Que los éxitos no paren de llegar con ese equipazo, Periko.

Pedimos el menú ReComiendo 24.4 para comer y fue, sin duda, una maravilla. Los entrantes en el recibidor del restaurante fueron todos espectaculares: la “croqueta”, arepa de serranito, “huevos con patatas y chorizo” y la oreo de foie, empezábamos muy fuerte con el menú. En la barra, el pastel cordobés con sardina y la sangría, deliciosos. Siguiendo en el salón, los tres panes, los aceites y la mantequilla muy buenos ( pero no os vengáis arriba y os los terminéis todo, que el menú es largo y si no acabaréis “a reventar” como nosotros). La mazamorra con varios “toppings” muy original, la gamba blanca en pepitoria riquísima, la rosada en adobo sabrosa y fresca, la presa con foie brutal y el plato con vaca y pollo en varias texturas una locura. La selección de quesos todos muy muy buenos. Y el prepostre y postre (sobre todo el postre) exquisitos. Cerrando con “de oca a oca”, para la que ya a penas teníamos hueco, pero aún así disfrutamos mucho. Fue una experiencia de alta gastronomía en toda regla de la que disfrutamos mucho.

Un nivel por encima de cualquier otro restaurante. Una experiencia única. Cada plato tiene su narrativa evocadora, su porqué, casi siempre de origen local y familiar. De lo que conozco, solo es comparable a Diverxo. Es algo que hay que hacer cada cierto tiempo para desintoxicarte de la cruda realidad. Recomendable cien por cien.

Expectacular! Si te gusta comer, si te gustan sabores diferentes y a la vez típicos, y mezclar texturas, este es tu sitio! Es un imprescindible si visitas Córdoba. Un servicio malísimo y profesional, el chef muy atento y la comida, inmejorable. Cuando volvamos a Córdoba, fijo que volvemos! Totalmente RECOMENDABLE !

Íbamos recomendados (como si bien dice su nombre) y era la primera vez que probaríamos un menú degustación y de un precio fuera de lo normal que sueles gastarte en un fin de semana de tapas. De principio a fin fue toda una experiencia que solo puede entenderse cuando estás dentro! Desde la atención recibida antes, durante y después del servio que fue magnífica. Unos platos que cuando las pruebas, hacen que te quedes sin palabras de lo bueno que están! No podría destacar ninguno ya que cada plato tiene su historia y un sabor totalmente diferente al anterior pero si tuviese que quedarme con uno, sería con la falsa canela de setas y ajo blanco.. sensación indescriptible! Y como leí en algún comentario, si de verdad hubiese ese Avecrem que dicen, por favor que me digan dónde lo compran que me llevo una caja jajaja Para terminar, que no os engañen el tamaño de los platos, ya que el último postre nos lo comimos a la fuerza de la pechá que nos dimos! Acabamos empechaos! Gracias a todo el equipo por esta insuperable experiencia!

Volvíamos a Cordoba después de tres años y no dudamos es volver a Recomiendo ya que nuestra primera experiencia fue muy buena. Esta segunda ocasión no nos decepcionó en absoluto, el personal encantador, Perico igual y la comida nos encantó. Nuestra elección fue sin maridaje ya que no somos aficionados al vino. La arepa, la gilda, el raviolí de pringá, etc todo rico, tal vez el postre de turrón me resultó un poco dulce en exceso, pero eso es un gusto personal y me encantó el toque de limón. Espero poder volver una tercera vez,