Le Petit Croissant en Zaragoza

Genial os recomiendo sus croissant son una pasada a mi me encanta el de York y queso y a mi hijo los de chocolate. Las tartas geniales y buena atención.

Todo lo que hay en la tienda está buenísimo y los croissant una pasada

Todo perfecto ! Encargue una cesta de desayuno y me equivoqué de día y en la entrega . Tengo que decir que me pusieron todas la facilidades del mundo para cambiar el día y que lo llevaran a casa ( y eso que era en fechas bastante complicadas , día de la madre ) y todo salió perfecto . Los productos excelentes. Muchas gracias por todo !

Desayunamos un par de croissants de chocolate y dos capuchinos. Todo muy fresco.

Voy de vez en cuando...pero siempre super bien.Las chicas son un Encanto,Laura la encargada es súper atenta,en fin un 10. La pena que es un sitio muy pequeñito y a veces tienes que esperar

Por el día de la madre pedí una cesta salada, llevaba de todo, Bocadillos, mini pizzas, saladitos... Ha sido un gran regalo, ¡repetiremos seguro!

Los mini croissants muy ricos y muy buen trato!!

Deliciosos los petit y el Croissant 🥐, lugar muy concurrido.

Impresionante y muy recomendable, para nosotros la mejor experiencia en Zaragoza con su cafe y croissant pequeñitos rellenos. Recomiendo 100%, sus chicas son super simpáticas y elpan de queso de morirse.

Estuvimos en el local de c/Hernán Cortes. La calidad de la bollería y del pan esta fuera de toda discusión, aunque el precio sea excesivamente elevado, incluso para la calidad que tiene. Lamentablemente el café con leche, sin color, sin crema, sin sabor. Obviamente se notaba que estaba hecho con la carga de un cortado e inundado de leche. Entiendo algo de café y ese café no estaba bien hecho. Todo el mundo puede tener un mal día o un mal momento y las cosas no salen siempre como se quiere, pero lo injustificable es la respuesta ante el comentario que le hicimos. En tono de superioridad y de forma altanera quiso tener la razón la empleada, insistiendo que la carga había sido sobrada, mirándonos de forma despectiva, como si no supieramos lo que decíamos. Ni una disculpa, ni una sonrisa, ni un intento de ganarse al cliente descontento, nada.