Sidrería Casa Niembro en Cabrales

La cocinera y la comida espectacular, los Camareros encantadores y los paisanus unos crack, entre todos hemos tenido un ambiente familiar, espero repetir pronto un abrazo fuerte!!!

Buenísimo sitio para comer . El dueño muy amable y encantador. Los tortos con picadillo riquisimo y los quesos de cabrales exquisitos.Muy bien de precio para lo que Dan de comer. volveremos

Qué puedo decir de Casa Niembro...dos años esperando para visitarlo y desde luego no ha decepcionado en ningún sentido. Tanto, que en cuatro días de vaciones, dos de ellos comimos en este restaurante. Empecemos por el principio. Está situado en la población de Asiego, un lugar precioso donde se puede disfrutar de la tranquilidad y sobre todo del paisaje y las vistas que hay. El restaurante es la "prolongación" del antiguo bar del pueblo que han continuado los hijos de la antigua dueña. La atención es maravillosa, además de informarte sobre los platos tienes el placer, mientras comes, de escuchar las historias de cómo elaboran su propia sidra y de dónde provienen algunos de los ingredientes de los platos que cocinan. Tienen una carta estupenda, donde hay posibilidad de pedir en muchos platos medias raciones o raciones enteras. AVISO: las medias raciones son enormes. Lo más destacado : CARTA COMPLETA SIN GLUTEN, por lo tanto mi celiaca pudo comer todo lo que quiso sin problemas. A destacar el cachopo sin gluten, los tortos con picadillo y la tabla de embutidos. Pero da igual lo que pidáis TODO está maravilloso. Ojalá volver muy pronto.

Fuimos con de personas celíacas y fue una gozada cenar ahí. Carta 100% sin gluten, toda la comida super rica (el cabritu y el cachopo increibles, y los postres también, sobre todo los frixuelos que lo sirven como una tarta), la sidra casera también estaba muy buena. Pueblito muy rural con unas vistas muy bonitas y trato muy familiar. Por sacar alguna pega, había solo una persona atendiendo el comedor y nos tocó esperar un poco para los segundos platos. Totalmente recomendable si eres celiac@!!

Al mejor sitio que podéis y debéis ir de Picos de Europa. Me encantó sin ningún tipo de duda. Estuvimos 5 días por la zona de cabrales y fuimos dos veces, una con la ruta de quesos que tienen y otra a cenar y así probábamos otras cosas y un acierto sin duda. TODA LA CARTA ES SIN GLUTEN (algo curioso teniendo en cuenta que es un pueblo de menos de 70 personas) La comida está exquisita, lo preparan todo ellos y está todo buenísimo. Y queríamos ir también un poco por el cachopo y pff, espectacular, el queso que utilizan y el jamón... Y no solo bastaba con la calidad de la comida si no que el servicio era maravilloso, son una familia muy agradable y que no tiene problema de darte una buena conversación o explicarte cualquier cosa que les preguntes. Además, el pueblo tiene unas vistas al Naranjo de Bulnes por todos los lados y puedes comer con vistas maravillosas. Sin duda, volveré cuando esté por allí porque todas las palabras buenas que diga son pocas.

Cenamos el menú espicha incluido en la Ruta’l Quesu y la Sidra. Todo PERFECTO. Además la cocina se ve desde la sala, aspecto que siempre gusta. Los regentes super amables y simpáticos y la comida muy rica y sabrosa. Recomendación: si como nosotros empezamos a cenar tarde por la ruta y nos quedamos solos en el restaurante, se agradecería algo de música ambiente 😉

Estuvimos un gran grupo de amigos y la comida excepcional y la gente también , tanto de la sidrería como la gente del pueblo Un diez y gran recuerdo Volveremos!!!!

Tanto la comida como la atención han sido muy buenas. Varias opciones vegetarianas. La ensalada de quesos riquísima!

Sidreria en un pueblo de encanto. Platos riquísimos, pedimos los tortos con picadillo que nunca habíamos probado y la verdad que nos sorprendieron, estaban muy ricos. El cachopo muy muy bueno, crujiente, un rebozado con muy buen sabor y nada pesado. De postre pedimos helado de turrón, no podéis dejar de pedirlo porque estaba muyy rico. Si volvemos a esta zona, repetiremos sin duda!!

Sitio recomendado por el dueño de los apartamentos donde estábamos y un sitio donde todo estaba increíble. Cogimos un cachopo super ligero ya que el rebozado nos contaron que está hecho con maiz, unas tortas con un queso y membrillo increíble, croquetas de jamón y sidra. Todo buenísimo. 100 % recomendable