Restaurante Ronquillo en Ramales de la Victoria

El dueño nos vio con mi perrita y al sentarnos en la mesa nos dijo que admitían perros. La habíamos dejado en el coche, fuimos a por ella y se portó genial. Todos los camareros majísimos. El sitio precioso, amplio, limpio. Un 10 de sitio.

5 estrellas y raciones y calidades Michelin! Amabilidad en el servicio y posibilidad de ir con pequeños perritos.

Gracias a David, por su magnífica comida y por su actitud amable y abierta , con un gran producto siempre fresco y magnifícamente elaborado manteniendo lo tradicional pero dándole su toque sin adulterar el resultado .Mención tb a su gran equipo en sala ,eficaces y amables que hacen al comensal sentirse en casa , como la gran familia que son . Lugar para volver sin duda , porque es volver a estar en casa .

Pedimos menú degustación de 70euros por persona ( 4 aperitivos, 2 entrantes, 2 pescados, 2 carnes y 2 postres). Nos ha dado la sensación de que comíamos los platos de carta pero en una versión más pequeña y de forma poco equilibrada. Es decir, meter en un menú degustación unas alubias con jabalí, perrechicos, carrillera de jabalí y cordero (además de otros platos) nos ha empalagado. Son platos con demasiado sabor y no se equilibraban com otros más ligeros como suele pasar en este tipo de menú. Objetivamente los platos estaban buenos, pero nos parece un menú aleatorio sin estructura y el resultado demasiado cargante. Los postres los dos de fruta, eso tampoco me ha parecido un acierto. Algunos ingredientes muy fuertes demasiado repetidos en platos: virutas de trompeta de la muerte en al menos 2 platos, jabalí en al menos 3 platos, perrechicos en dos platos… creemos que nos gustaría más de carta que como menú degustación. Las camareras muy atentas pero en ocasiones hemos sentido demasiada espera porque tenían que atender bastante gente.

EXCELENTE PROPUESTA GASTRONÓMICA EN RAMALES DE LA VICTORIA. Viajo con frecuencia a las localidades de Santoña. Laredo. Santander, etc, y he pasado por esta localidad varias veces. Ha sido el descubrimiento de este excepcional establecimiento por la recomendación de un amigo. Es un espacio reformado modernista con mucho gusto en la decoración, techos altos, distancia entre las mesas. Muy confortable. Se aprecia desde el primer momento la presencia y el compromiso de los responsables del establecimiento con Cecilia a los mandos de la sala en un compromiso y sensibilidad con el cliente. Estas actitudes, permiten que estos negocios alcancen las metas de productividad, porque se enfocan fundamentalmente en el cliente. La cocina moderna de fusión, pero respetando la tradición. Algo que una gran mayoría de aficionados a la gastronomía agradecemos. Todos los platos con excelente presentación modernista y de alto nivel. La excelente selección de las anchoas, el lomo de jabalí, las minicroquetas con su presentación original, el salmonete y el postre de torrija. Todos en perfecto equilibrio. ¡Enhorabuena a propietarios y a todo el equipo de profesionales!

Fantástico lugar Recomendable cien por cien La comida exquisita y el trato familiar Volveremos

Llegamos más tarde de la cuenta y aún así no dudaron en atendernos. Nos explicaron los platos con mucho cariño y las recomendaciones que nos hicieron estaban todas deliciosas. El pan lo hacen ahí mismo y es increíble. Por poner una pega, el solomillo se sirve muy pobre de patatas. Recomiendo el salteado de pulpo y la carrillera. Sin duda repetiremos!

La mejor comida de toda la zona. Imprescindible

Y después de todo y tanto, siempre nos queda el Ronquillo. Para volver a disfrutar de buen gusto culinario. Innovación sin excentricidades difusas en los productos. Todo absolutamente casero y fresco! Platos contundentes y cartas renovadas según la temporada de cada alimento. David y Ceci, convierten el restaurante en "hogar" por el trato cercano, por la amabilidad y la sonrisa siempre presentes. Los camareros son absolutamente cumplices de su esencia y profesionalidad. Hay tanta calidad y buen gusto en este restaurante que siempre quieres volver. Sorprendentemente el precio es muy asumible, teniendo en cuenta que es un Restaurante de Recomendación Michelin. Muy recomendable!!

El lugar es un amplio caserón muy agradable, muy bonito y bien decorado. A pesar de los esfuerzos para calentarlo hacia un poco de fresco. Especializados en caza. Tomamos una ensalada de cecina y unas mollejas (un plato original y muy bien preparado) . De segundo un sándwich de codorniz (no lo recomiendo, tenía demasiado pan y muy contundente para mí gusto) y un lomo de ciervo (creo) que estaba espectacular. El servicio al principio genial pero luego se lleno y no daban abasto. Muy lentos para traer la cuenta. Para el tipo de restaurante, creo que tenían poca variedad de vinos y bastante caros. Aparcamiento enfrente. Salimos a 55 por persona.