Restaurante La Alcaldesa en Segovia

Si tengo que ir a Segovia a comer cochinillo, iré siempre aquí. Increíble la calidad del asado y la materia prima. Deliciosos los judiones. El servicio esmeradísimo y el precio más que correcto. Fuimos un grupo de 25 personas y los tiempos de servicio fueron perfectos. Totalmente recomendable. Repetiremos sin duda.

En mi cabeza, Zamarramala siempre ha estado presente por la fiesta de Las Águedas y por la panorámica de Segovia, pero desde ayer la culpa la va tener La Alcaldesa. Reservamos una comida para 25 personas basados en las reseñas que ya tenía (que siempre me genera bastante incertidumbre) y no pudimos acertar más. Sin riesgos, de primero Judiones. Pero esos judiones (con mayúscula) suaves, que se deshacen, nada pesados, de 10. La alternativa a los Judiones era Sopa Castellana. Acabaron ganando los primeros por fama (y ojo, eran TOP), porque la sopa estaba también para ponerle un piso 😂. Y llegamos al clímax, el Cochinillo. Suave, jugoso, tierno pero crujiente por fuera… vamos, un acierto absoluto!! Y de postre, tarta y natillas caseras, muy buenas!! Y no puedo terminar sin mencionar la atención. Gracias a Blanco y familia por hacernos sentir como en casa. Volveremos seguro!!

Comimos distintas cosas y todo estaba bien, aunque el plato de mollejas llevaba más pimientos que mollejas. Además estaban demasiado fritas y pierden la textura característica de las mismas. El servicio al principio estaba muy disperso, estuvimos sentados en la mesa un rato antes de que nos atendieran. Por lo demás bien.

El mejor cochinillo que he probado en toda mi vida!!! Eso sí, lo teníamos encargado para las 14:30, y hasta las 15:30 nada de nada. Pero todo riquísimo!

Para comer en familia a un precio recomendable y una calidad excelente. Trato servicial y cercano. Cochinillo segoviano buenísimo por encargo. Carnes y vinos buenísimos. Un lugar agradable en un entorno rural mágico. Muy cerca de Segovia. Volveremos a repetir.

Asador de rancio abolengo, tradicional y agradable, donde tomárselo con calma y disfrutar de comer lo de toda la vida segoviana