Restaurante Bellavista Montepego en Pego

Celebramos la comunión de mi hija ayer en el restaurante y recibimos una atención excelente. Sitio perfecto para ir a comer o cenar, con piscina, jardin, barbacoa,etc. Repetiremos.

Comida, servicio, atención y lugar de 10. El camarero, Gabi, muy atento y cercano, la comida espectacular y el sitio precioso. Volveremos sin duda!

Un descubrimiento increíble, sitio especial por su ubicación y vistas de todo el lugar, pero especial como lo tienen todo de cuidado y al detalle, encima se come de maravilla y el trato con el personal y el dueño es exquisito, te hace sentir como en casa, volveremos seguro

Un lugar excelente donde probar los sabores valencianos con un trato mejor que bueno, a un precio más que razonable. Volveremos!!

La verdad me.sorprendio el ambiente muy lindo y recomendable se respira mucha buena energía

Increíble, posiblemente sea el mejor arroz que he comido y teniendo en cuenta el nivel de la Marina Alta este está por encima de cualquiera, las brasas se nota en el sabor. Las patatas trufadas de entrante son pura magia así como el resto de platos y postres. De 10 todo, se nota mucha calidad de los alimentos y mencionar también el gran trato de los camareros, algo que hoy escasea , encontrar profesionales del sector tan buenos, amables y que te hacen sentir como en casa. Es la primera vez que me he sentido en el paraíso comiendo por la comida, el servicio y el entorno, un espacio precioso, bien ambientado y relajante lejos del estrés. Repetiré sin duda

Restaurante con buenas vistas y en un entorno precioso. Un lugar cuidado al detalle para ir a comer en pareja, con amigos o con niños y perros. La comida es espectacular, de calidad. Las paellas son de leña, puedes ver cómo las cocinan allí mismo. El personal muy atento y amable en todo momento. Un sitio para repetir seguro.

Desde lo alto de la urbanización lo primero que te encuentras es una vista panorámica de la marjal de Pego con sus humedales. Cuando entras te encuentras con un restaurante con piscina a la sombra de viejos algarrobos. Dentro del salón buena ambientación con amplios ventanales al mar. En cuanto a la comida dan ganas de pedir toda la carta, incluyendo sus tartas de chocolate y queso hechas con mantequilla. Se nota que este equipo tiene ganas de trabajar y agradar con su trato y buen hacer. Merece la pena probarlo. Para mí, una grata experiencia

Lugar maravilloso, buen ambiente, comida buenísima, nos sentimos como en casa. Gabriel y Vicent muy atentos y super agradables

Magnífico lugar y bienvenida de Gabriel. Sonriendo amigablemente y escuchando a estos clientes. La comida es excelente y recomiendo los aceites y el vino. Para descubrir sin desvío