Entre Dos Fuegos en Toledo

Fuimos a probar el menú degustación y tuvimos una gran experiencia. Un lugar muy acogedor donde puedes visitar la que fue la casa de Paco de Lucia y degustar un delicioso menú elaborado para su disfrute con mucho gusto y detalle. Destacar también el buen trato del personal, José y Yoli, que nos hicieron sentir como en casa.

Experiencia muy buena, el cocinero en todo momento explicando como comer cada plato la comida espectacular y además un pequeño tour por la que fue casa de paco de lucia.

Si quieres una experiencia culinaria diferente dejate llevar por los anfitriones y disfruta de su cariño por lo que hacen y como lo hacen. La casa de Paco de Lucia en el centro de Toledo sirve como escenario de un espectaculo de senaciones para lo sentidos.

Excelente atencion y comida muy rica

Un restaurante en un lugar precioso y muy interesante (se encuentra dentro de la que fue la casa de Paco de Lucía) El restaurante tiene capacidad solo para 8 o 9 comensales, lo que aporta una atención muy personalizada pero no invasiva. La comida está muy buena. Los platos se preparan delante de los comensales, y el chef te explica bien cada uno de ellos al servirlos. La atención tanto de la persona que te recibe como del chef es muy buena, lo que hace que la comida y el tiempo que se pasa ahí sea una experiencia inolvidable. Añadir que el precio por persona nos pareció muy bien. en relación calidad precio. Se trata de un menú degustación de alta cocina, en un lugar incomparable con una atención personalizada. Antes de entrar a la sala de restaurante, puedes subir a la azotea del edificio que tiene una preciosas vistas de Toledo y de la plaza donde se encuentra. Tras la comida, muy amablemente te muestran la parte del sótano de la casa donde Paco de Lucía tenía su estudio privado.

Genial experiencia gastronómica de show cooking en la que fuera la casa de Paco de Lucía en el casco antiguo de Toledo. Magnífica atención de José y Yoli, que hacen la experiencia en extremo agradable, más allá de las estupendas elaboraciones que pudimos degustar. Genial también la visita al estudio, cueva y azotea de este precioso hotel boutique.

Muy muy recomendable, empezando por los anfitriones te sientes como en familia, Cena excelente (menú degustación exquisito)lugar con mucho encanto y el sentarte al rededor de los fogones acompañados de otras dos parejas que no conocíamos ha sido una experiencia Muy grata y fuera de lo común. En una palabra excelente

Un restaurante muy especial. Ubicado en la que fue casa de Paco de Lucía. Se come en una barra para ocho comensales y el chef está al otro lado cocinando y explicando cada uno de los exquisitos platos. El trato, el ambiente y la comida son exquisitos, consiguiendo que comer allí sea una experiencia extraordinaria. Totalmente recomendable. Un 10. Comimos ayer y repetiremos cuando volvamos a Toledo.

He de decir que el sitio está súper chulo y la atención es muy buena, te hacen sentir como en casa. Hemos salimos con un sabor agridulce respecto a la comida. En primer lugar, te ponen 4 aperitivos que no puedo decir que sean malos, pero a mí no me gustaron. El primer entrena era pan brioche con guacamole y sardina. El guacamole era de bote, tenía un sabor muy artificial y la sardina entera quitaba todo el sabor de lo demás. Respecto al segundo entrante, raviolis con queso, no tengo nada que decir, estaba muy bueno. El tercer entrante, huevo poché con bacon y alcachofas. Las alcachofas eran las de bote de toda la vida, eso me decepcionó bastante. El principal de pescado estaba bueno, pero tenía una salsa de castañas que no sabía nada a castañas, solo a bechamel. El segundo entrante, lasaña de carrillada, la pasta estaba seca, encima del canalón pusieron una barrita de queso al horno que estaba correosa ( para mí, esto fue el peor fallo) y la salsa de calabaza, más de lo mismo, no sabía nada a calabaza y solo a bechamel. El postre, brownie con helado, estaba muy bueno no tengo nada que decir. Por lo que pagamos, 140 euros por persona, no salimos contentos, es una pena porque él concepto es muy bueno, pero no creo que valga eso. Lo siento, pero no volveremos.

Menú degustación muy variado. Sitio espectacular, muy buena atención, y céntrico. Tres pre-entrantes, tres entrantes, plato de pescado y plato de carne, postre y café. Después de comer nos enseñaron la cueva de la casa de Paco de Lucia. Experiencia muy recomendable.