El Pato Laqueado en Pozuelo de Alarcón

Un poco depecionante. Fuimos a la reapertura mi familia y yo y han cambiado el concepto. Ya no te atienden en mesa, sino que pides a traves de una tablet y lo incomodo es que tienes un cronometro, una vez que pides, para volver a pedir, con lo que al final tardan mas de la cuenta y estas un rato que no tienes comida o bebida en la mesa.

El sitio es precioso, no obstante si un domingo quieres comer allí debes llegar a primera hora, es decir, a las 13:300 si no, ya te puedes preparar para hacer una buena cola. La comida está bastante buena pero si eres alérgico al marisco, olvídate de poder probar ninguno de los fideos o algún tipo de sopa. Tienes que pedir en tandas de máximo 8 platos cada 10 min por mesa. Las bebidas y postres van a parte. Suele tardar un poco en llegar. Los camareros son muy amables.

Muy buena calidad pero el precio elevado.

¡Enhorabuena a Ana y a su equipo por otra noche inolvidable! Después de algún tiempo, hemos regresado a cenar y, como siempre, hemos quedado encantados con la experiencia. El nuevo ambiente es realmente hermoso y la comida sigue siendo tan espectacular como recordábamos. Además, el trato amable del personal contribuye a crear una velada maravillosa. ¡Gracias por mantener la calidad y el encanto que tanto apreciamos!

La verdad que el sitio está muy bien. Y la atencion, pero traigan adaptadores para niños porfa

Decoración alegre y cálida, con mesas que respetan un ambiente de privacidad entre ellas. Los platos tienen una presentación cuidada, tienen la cantidad justa para seguir experimentando con mas opciones.

Restaurante bueno, eso sí, faltaría organización con el Tiempo de espera, con unos kioskos de pedir un Ticket de espera y un turnomatic. Pero por lo demás genial.

Una gran reforma encantados con todo

Es exactamente igual que el nuevo de príncipe pío. Que a su vez, es de los mismos dueños q el de la Vaguada. Realmente, calidad media a un buen precio. No merece la pena pedir el pato laqueado, el pato de la carta del buffet está casi más rico. Los camareros son jóvenes e inexpertos, algunos no tienen ni idea de español, pero son muy lindos, xq se les ven las ganas de aprender, e incluso el miedo antes del servicio (hemos llegado muy pronto). Todos hemos sido nuevos alguna vez, ellos muy voluntariosos, aprenderán rápido. Lo mejor la chica que creo q es la encargada, hemos tenido un problemilla xq nos hemos equivocado pidiendo, mi novio se ha puesto muy borde, pero ella ha sabido llevar la situación a la perfección, y ha sido muy amable a pesar de lo grosero que se ha puesto mi novio. El lugar muy agradable y bien ambientado.

Buena calidad! Gente muy maja!! Repetiré, muyy recomendable