Anhelo Restaurante en Castelló de la Plana

Anhelo, como restaurante recomendado por la Guía Michelin, tiene mucho que ofrecer, gracias al chef y propietario Cristian Granero. Sus habilidades culinarias son evidentes en los platos principales bien elaborados, que muestran su célebre experiencia en repostería y repostería. Sin embargo, los postres no estuvieron a la altura de las expectativas. El personal es amable y cálido y mejora la experiencia gastronómica con su actitud acogedora. A pesar de esto, hay pequeños detalles del servicio que podrían mejorarse, como servir agua con prontitud y recoger los envoltorios, sobre todo teniendo en cuenta que sólo había seis mesas para dos camareros. El principal inconveniente es el propio establecimiento. El ambiente no era ideal y el nivel de ruido era bastante alto, lo que restó valor a la experiencia general. En general, Anhelo tiene un potencial increíble, pero hay áreas que necesitan atención para que la experiencia gastronómica sea realmente excepcional.

Inauguramos el local, junto con otra mesa. Atención inmejorable. Ambiente especial y agradable. Comida exquisita. Se nota el mimo con el que tratan el producto. Muy buena experiencia. Esperamos poder volver pronto.

Hemos ido a comer hoy mi prometida y yo. La comida exquisita, elaborada al momento y a la vista del comensal, con productos de cercanía y mucho mimo. El servicio atento y discreto, y el ambiente muy íntimo y acogedor. Adrián es un gran chef que se preocupa por dar lo mejor de sí mismo y en su comida, sin duda, es un referente de la alta cocina en Castellón.

Es la segunda vez que visito Anhelo, en ambas ocasiones con el menú Pasado, Presente y Futuro, el primer día para comer y el segundo para cenar, y en ambas, cada plato ha sido diferente al anterior, con sabores fusionados en un mismo plato que nunca pensarías que podrían llegar a potenciarse mutuamente pero de forma sencilla, con producto de calidad y sin excentricidades, lo que hace que podamos disfrutar todas las personas que asistimos independientemente de nuestros gustos. Igualmente, antes de asistir, te preguntan si alguien no quiere o puede comer de algo concretamente y te adaptan los platos de forma perfecta. El local es sencillo, tranquilo. bonito y con una música que acompaña y completa la experiencia junto con la amabilidad y profesionalidad del personal que sobretodo en esta segunda ocasión, fueron encantadores. Tienen una carta de vino muy amplia y a muy buen precio, difícil de encontrar hoy en día. Mi plato preferido en ambas ocasiones ha sido el guiso de calamar, y eso que eran completamente diferentes, en la primera ocasión en su tinta, acompañado de alcachofas y está segunda vez con una bechamel y una espuma, pero la base del guiso es un espectáculo. Se elija el menú que se elija sí o sí hay que pedir el pan bicolor, hecho de masa madre de dos harinas una de ellos de algarrobo, y bañado en aceite picual, un sueño de pan. Para finalizar, el postre lo acompañan de una mistela casera, fresquita, suave y afrutada, que en esta segunda vez, nos la sacaron con un prepostre de fresas y helado que me pareció la combinación perfecta, junto al helado de kéfir del postre. Es una experiencia única a un precio único, seguiré probando sus creaciones, la siguiente vez en su nuevo local que pronto visitaré y en el que deseo que tengan mucho éxito pero mantengan su esencia, aue al fin y al cabo, es lo que los hace únicos. ENHORABUENA ☀️🌟

Hay experiencias y experiencias.. pero sin duda alguna cada vez que vuelvo a este loca consiguen sorprenderme y sorprender a mi paladar. Empiezan con una atención en sala insuperable, impoluta, delicada.. La bodega te ofrece viajar donde quieras para poder disfrutar de la experiencia gastronómica al cien por cien… y continuamos de la mano de su Chef Cristian granero el con sus manos elaborando esos platos hace que sea imposible olvidar dicha experiencia. PASIÓN es lo que nos demuestra cada vez que tenemos el placer de ir a su restaurante.. como siempre insuperable. Enhorabuena equipo.

Hemos estado unos días por Castellón, fuimos a comer al restaurante Anhelo y nos encantó. Tomamos un menú degustación que nos pareció exquisito. Mención especial merece el pan, recomiendo no perdérselo.

FANTASTATICO! Calidad de comida, cocina y servicio espectaculares. Excelentes recomendaciones con el vino. Hacia mucho tiempo que no disfrutábamos tanto de una salida gastronómica!

Experiencia inolvidable y todo super explicado y bueno .Para repetir y decir a la gente que lo visite por qué de verdad

Probamos el menú intermedio y nos gustó. Las cantidades son pequeñas pero está todo muy bueno. Algunos platos del menú los cambian según el producto que compran ese día, lo cual por un lado está bien porque es sorpresa, pero también puedes encontrar alguno que no te guste. El postre delicioso y la atención genial.

Menú degustación in crescendo con productos disponibles de proximidad. Mención especial para un calamar encebollado cubierto de salsa holandesa y coronado con alcachofa confitada.Toda una experiencia. Cristian aúna sensibilidad con un derroche de creatividad, todo ello enjugado con una conmovedora pasión. Enhorabuena y mucha suerte en tu andadura. Barreda y Resino ya te están viendo por el retrovisor....